Santo Domingo Este se convirtió en un ring improvisado durante la juramentación del nuevo alcalde, Dío Astacio, cuando el alcalde saliente, Manuel Jiménez, se rebeló contra el protocolo.
¿El motivo? Que Jiménez quería rendir su informe de gestión antes del discurso de Astacio, como si fuera un gallo de pelea defendiendo su territorio. La tensión se cortó con cuchillo mientras Jiménez recitaba su informe, con la mirada desafiante clavada en su sucesor. Finalmente, Jiménez, derrotado, pero no rendido, abandonó la sala capitular como un león herido.
La frase que encendió la batalla fue un rotundo «¿Y qué es esto, y pa’donde va esto?», lanzada por Jiménez. Según el alcalde saliente, la ley le amparaba para presentar su informe en el primer turno de la ceremonia.
«¡A los preceptos elementales de la ley de este país, ¿y qué es esto, y pa’ dónde va esto?! No, así no . Me disculpan, me disculpan la imprudencia, si lo fuera, es la certeza de que el que cumple un deber, si es público, tiene que dar cuenta de eso, y con eso no se juega», declaró Jiménez, con la voz temblorosa por la emoción del momento.
Y como buen gallo de pelea, Jiménez remató: «El desorden puede comenzar ahorita, pero tienen que esperar a que yo me vaya».
El equipo del exalcalde, acusó a las nuevas autoridades de incumplir el protocolo.
