InicioInternacionalesPosible libertad para los hermanos Menéndez tras 35 años en prisión

Posible libertad para los hermanos Menéndez tras 35 años en prisión

Reevaluación del caso Menéndez
El caso de Lyle y Erik Menéndez, sentenciados a cadena perpetua por el asesinato de sus padres en 1989, ha tomado un nuevo rumbo. Este jueves, el fiscal del condado de Los Ángeles, George Gascón, anunció su intención de solicitar una nueva sentencia para los hermanos, quienes podrían quedar en libertad si un juez decide reabrir el caso. La vista judicial está programada para la última semana de noviembre, donde se decidirá su futuro.

Nuevas pruebas y conducta ejemplar
El fiscal Gascón ha mencionado que, tras una cuidadosa revisión del caso, se han encontrado nuevas pruebas que podrían cambiar el destino de los hermanos Menéndez. Entre las pruebas destaca una carta en la que uno de los hermanos menciona abusos sexuales por parte de su padre. Además, su conducta ejemplar en prisión, donde han participado activamente en programas de rehabilitación, podría jugar a su favor en la decisión final.

El impacto mediático del caso
El crimen de los hermanos Menéndez conmocionó a la sociedad en 1989, y la cobertura mediática ha sido intensa desde entonces. Los juicios televisados en la década de 1990 captaron la atención del público, y más recientemente, una serie de Netflix y un documental han reavivado el interés en el caso. Incluso personalidades como Kim Kardashian han expresado su apoyo a los hermanos, argumentando que ya han pagado su deuda con la sociedad.

Argumentos del fiscal Gascón
Gascón ha reconocido que los hermanos cometieron «actos horribles» al asesinar a sus padres, pero enfatiza que no tuvieron acceso a la libertad condicional en su sentencia original, algo que considera injusto. Para el fiscal, los Menéndez han demostrado una clara rehabilitación y merecen la oportunidad de ser reintegrados a la sociedad, una opinión que ha causado controversia incluso dentro de su propia oficina.

División familiar y social
La familia Menéndez está dividida sobre el destino de los hermanos. Mientras algunos familiares abogan por su liberación, otros creen que deben permanecer en prisión. La comunidad también se encuentra dividida, con opiniones polarizadas sobre si Lyle y Erik merecen una segunda oportunidad tras 35 años de encierro.

Detalles del caso
Lyle (de ahora 56 años) y Erik Menéndez (de 53) fueron sentenciados a cadena perpetua por asesinar a sus padres, José y Kitty Menéndez, en su casa de Beverly Hills, situada en el condado de Los Ángeles, California, en agosto de 1989. Ellos tenían 21 y 18 años; sus padres, 45 y 47. En el juicio, los hermanos aseguraron que habían sufrido abusos sexuales, pero también psicológicos, por parte de su padre desde que tenían alrededor de seis años, que su madre lo sabía y nunca lo frenó y que temían por sus vidas. Sin embargo, sus testimonios fueron acogidos en la corte con frialdad y no les sirvieron de atenuantes. Además, el hecho de que al morir sus padres fueran los herederos de 14 millones de dólares (más de 35 millones, ajustados a la inflación de 2024) y que tras el asesinato se gastaran miles y miles de dólares en relojes de lujo, coches de alta gama, estancias de hoteles y en montar un restaurante en Nueva Jersey, en la otra punta del país, pasó factura a su imagen pública.

Tomado de El País