Una investigación liderada por la Universidad de Virginia (UVA Health) plantea una posibilidad revolucionaria: un medicamento usado por décadas para tratar el VIH podría ayudar a prevenir el Alzheimer, una de las enfermedades más costosas y devastadoras del mundo.
Lo que se descubrió: El estudio, publicado en la revista Alzheimer’s & Dementia, encontró que ciertos fármacos antivirales —conocidos como inhibidores nucleósidos de la transcriptasa inversa (ITIN)— están asociados a una reducción progresiva del riesgo de desarrollar Alzheimer. De hecho, los pacientes tratados con estos medicamentos mostraron casi un 10 % menos de riesgo por cada año de uso continuo.
El hallazgo se basa en el análisis de 24 años de datos médicos de más de 270,000 pacientes. Y podría marcar un antes y un después en la lucha contra esta forma común de demencia.
¿Cómo funciona este efecto?
Según los investigadores, el vínculo entre los ITIN y la prevención del Alzheimer estaría en su capacidad para bloquear los inflamasomas, complejos proteínicos que activan procesos inflamatorios dañinos en el cerebro. La neuroinflamación es cada vez más reconocida como un factor clave en el deterioro cognitivo.
El Dr. Jayakrishna Ambati, autor principal del estudio, asegura que estos medicamentos podrían estar interrumpiendo el proceso degenerativo “desde la raíz”.
Alzheimer: una amenaza en crecimiento
El Alzheimer afecta actualmente a casi 7 millones de personas en EE.UU. y genera un gasto anual superior a los 345 mil millones de dólares, según la Alzheimer’s Association. En República Dominicana, aunque no existen cifras oficiales actualizadas, se estima que la cantidad de personas con demencia está en aumento, presionando al sistema de salud y a las familias.
De confirmarse los resultados en ensayos clínicos, el impacto sería enorme: hasta un millón de nuevos casos podrían prevenirse cada año a nivel global, con un ahorro multimillonario para los sistemas sanitarios.
La reutilización de medicamentos: una vía rápida
Una de las ventajas de esta línea de investigación es que los ITIN ya son fármacos aprobados y seguros para su uso. Esto acelera el proceso de validación en caso de que se confirme su eficacia en la prevención del Alzheimer.
Además, UVA Health también ha desarrollado un nuevo compuesto, el K9, que en estudios con animales logró bloquear los inflamasomas, revertir la pérdida de memoria y mejorar el aprendizaje. Se espera que pronto comiencen los ensayos en humanos.
Precaución: no es momento de automedicarse
Aunque el hallazgo genera esperanza, los expertos aclaran que se trata de estudios observacionales y no de ensayos clínicos formales. Es decir, no hay evidencia suficiente aún para recomendar el uso de estos medicamentos como tratamiento preventivo fuera de un entorno controlado.
“Mostramos una fuerte correlación, pero no una relación causal definitiva”, advirtió el Dr. Ambati. Por eso, llaman a la prudencia y a esperar los resultados de futuras investigaciones clínicas.