InicioSaludLa clave para prevenir la hipertensión: ejercicio regular en la adultez

La clave para prevenir la hipertensión: ejercicio regular en la adultez

A medida que envejecemos, mantener bajo control nuestra presión sanguínea se convierte en una prioridad. Aunque sabemos que la actividad física regular ayuda a reducir los riesgos asociados a la hipertensión, el misterio radica en el «cómo, cuándo y cuánto» de este ejercicio.

Recientemente, un equipo de investigadores de la Universidad de California en San Francisco llevó a cabo un estudio para analizar cómo el ejercicio regular a lo largo de la vida impacta en la tensión arterial en edades posteriores. La conclusión fue clara: mantener altos niveles de actividad física en la adultez temprana puede ser clave para reducir el riesgo de hipertensión en el futuro.

«El estudio sugiere que continuar con altos niveles de actividad física durante la adultez temprana es crucial para mantener la presión arterial bajo control», explicó Kirsten Bibbins-Domingo, coautora del estudio.

¿Por qué la hipertensión es peligrosa?

La hipertensión, o presión arterial alta, ocurre cuando la sangre ejerce demasiada presión sobre las arterias, lo que puede generar dolores de cabeza, dificultad para respirar o incluso hemorragias nasales. Sin embargo, los efectos más peligrosos ocurren a largo plazo, ya que esta condición está asociada con riesgos cardiovasculares graves, como los infartos.

El estudio: 5.115 participantes seguidos durante tres décadas

El estudio incluyó a 5.115 personas de entre 18 y 30 años que fueron seguidas durante 30 años, como parte del estudio CARDIA (Coronary Artery Risk Development in Young Adults). Los participantes, provenientes de diferentes áreas urbanas de Estados Unidos, fueron analizados en cuanto a su nivel de actividad física y su presión arterial.

Ejercicio como factor protector

El equipo de investigación descubrió que el aumento en los niveles de hipertensión estaba vinculado a una disminución en los niveles de actividad física. Como se ha demostrado en estudios previos, el ejercicio regular ayuda a mantener la presión sanguínea baja, lo que reduce significativamente el riesgo de hipertensión en etapas posteriores de la vida.

Los resultados del estudio indicaron que alcanzar al menos cinco horas de ejercicio moderado a la semana puede reducir el riesgo de hipertensión. Este es el doble de las dos horas y media recomendadas actualmente. Los participantes que lograron mantener este nivel de actividad a lo largo de su adultez temprana vieron una reducción del 18% en el riesgo de desarrollar hipertensión.

El estudio también reveló diferencias en los niveles de actividad y presión arterial según el grupo étnico de los participantes. Los investigadores observaron que los afrodescendientes y los blancos, tanto hombres como mujeres, presentaban distintos patrones en cuanto a cómo evolucionaban sus niveles de actividad física y sus niveles de hipertensión a medida que envejecían.

(XATAKA)