Si pensabas que meterte bajo agua helada todas las mañanas te haría más productivo, más fuerte o más resistente al estrés, te tenemos malas noticias: la ciencia dice que todo eso es puro cuento.
Investigadores de la Universidad del Sur de Australia analizaron 11 estudios globales sobre los supuestos beneficios de las duchas frías y llegaron a una conclusión clara: no hay pruebas sólidas de que realmente mejoren la salud o el rendimiento mental.
🔹 ¿Menos estrés? Sí, pero solo por 12 horas
El estudio encontró que las inmersiones en agua fría pueden reducir el estrés, pero el efecto dura solo medio día. Así que si pensabas que una ducha helada te haría invencible contra el estrés laboral, mejor busca otra solución.
🔹 ¿Mejor sueño? Solo para algunos
Hubo cierta relación entre dormir mejor y las duchas frías, pero la mayoría de los estudios solo analizaron a hombres, por lo que no hay evidencia suficiente para generalizar este beneficio.
🔹 ¿Sistema inmunológico más fuerte? No hay pruebas
Algunas personas que se duchan con agua fría faltaron menos al trabajo por enfermedad, pero no hubo mejoras significativas en su sistema inmunológico.
🔹 ¿Menos inflamación muscular? Todo lo contrario
En lugar de reducir la inflamación, los investigadores encontraron que el agua fría provoca un «pico de inflamación» justo después del baño, como una especie de agujetas sin ejercicio. Esto puede ser útil para atletas de alto rendimiento, pero no para el ciudadano común.
🔹 Los influencers y el mito del agua helada
Figuras como LeBron James o Gwyneth Paltrow han promovido los supuestos beneficios de los baños en agua fría. Pero los expertos advierten que, para la mayoría de las personas, sumergirse en agua helada es más un reto viral que una práctica con beneficios reales.
💡 En resumen: a menos que seas un atleta olímpico, lo único que vas a lograr con una ducha fría es terminar más rápido y con mucho frío.
(Xataka)