Un panel realizado en la Ciudad Sanitaria Luis Eduardo Aybar reunió a organizaciones comunitarias y especialistas en salud pública para cuestionar el modelo de autogestión que rige en algunos hospitales dominicanos. Los convocantes, entre ellos el Conjunto Comunitario por la Defensa de la Salud Pública, la Asociación Latinoamericana de Medicina Social (Alames) y la Escuela Multitemática, advirtieron que este sistema está limitando el acceso equitativo a los servicios de salud.
¿Qué es el modelo de autogestión y por qué genera rechazo?
Durante el encuentro, los panelistas explicaron que, aunque los hospitales autogestionarios siguen siendo formalmente públicos, en la práctica funcionan como empresas privadas. Es decir, operan bajo lógicas de mercado, priorizando la rentabilidad sobre las necesidades de salud de la población. Según los expertos, esto ha provocado una transformación en la relación entre el sistema y los usuarios: los pacientes ya no son vistos como ciudadanos con derechos, sino como clientes con capacidad de pago.
Este cambio de enfoque, según denunciaron, favorece a quienes pueden costear los servicios y deja fuera a los sectores más vulnerables, que muchas veces son rechazados o enfrentan múltiples barreras para ser atendidos.
Denuncias de clientelismo, corrupción y falta de participación
Los expertos también señalaron que este modelo facilita la captura de los hospitales por grupos económicos, políticos o incluso candidaturas locales, quienes utilizan los centros de salud para fines particulares. La falta de transparencia en el manejo presupuestario, administrativo y operativo de estos centros fue otro de los puntos críticos señalados por el panel.
Frente a esto, reclamaron un modelo verdaderamente autogestionario que incluya a las comunidades en la toma de decisiones, en lugar de excluirlas del diseño y control de los servicios que reciben.
La salud como derecho, no como negocio
Tanto los expertos como los líderes comunitarios presentes coincidieron en que la atención médica debe seguir siendo un derecho universal, público y gratuito. Rechazaron la idea de que los hospitales operen con fines de lucro y advirtieron que la tendencia actual representa un retroceso en materia de salud pública.
Plantearon que los servicios deben organizarse a través de redes públicas integradas, con participación ciudadana real y con un enfoque que priorice el bienestar colectivo por encima de intereses privados.
Advertencia de movilización ante posible privatización
Como conclusión del encuentro, los comunitarios dejaron clara su postura frente a lo que consideran una amenaza inminente: la conversión definitiva de la Ciudad Sanitaria Luis Eduardo Aybar en un hospital autogestionado sin participación popular. Reafirmaron que no permitirán que ese cambio se consolide y advirtieron que están dispuestos a ocupar las instalaciones si es necesario.
“El pueblo está dispuesto a defender su derecho a la salud”, afirmaron, en lo que consideran un llamado urgente a las autoridades del Servicio Nacional de Salud, el Ministerio de Salud Pública y los responsables de la Ciudad Sanitaria. Para ellos, este modelo no solo representa una privatización encubierta, sino también un atentado contra las comunidades que más necesitan atención médica digna y accesible.