El anuncio del expresidente Donald Trump sobre su intención de imponer un arancel del 100% a películas producidas fuera de Estados Unidos generó preocupación en la industria cinematográfica de Hollywood. La medida, según afirmó en su red Truth Social, busca promover que los filmes se realicen exclusivamente en suelo estadounidense, bajo el lema: “Queremos películas hechas en Estados Unidos, ¡de nuevo!”.
Impacto potencial en la producción global
Expertos del sector calificaron la propuesta como poco realista y contraproducente. El abogado del espectáculo Jonathan Handel señaló que muchas superproducciones, como la saga “Misión Imposible”, recurren a escenarios internacionales por motivos artísticos y técnicos. “¿Qué se supone que hagamos si Tom Cruise tiene que escalar la Torre Eiffel? ¿Grabar en Las Vegas?”, ironizó el jurista.
Dudas sobre la aplicación del impuesto
La medida ha despertado incertidumbre sobre su viabilidad técnica, ya que muchas películas se filman digitalmente y se distribuyen a través de internet. Especialistas advierten que un arancel de este tipo aumentaría significativamente los costos de producción, lo que podría afectar la competitividad de los estudios estadounidenses en el mercado global.
La sola mención de esta posible política provocó una caída en las acciones de grandes estudios como Disney, Netflix y Paramount. Aunque el secretario de Comercio, Howard Lutnick, indicó que “están trabajando en ello”, la Casa Blanca aún no ha definido cómo se implementaría la medida ni cuándo entraría en vigor.
(DW Español)