El acuerdo aprobado por el Congreso garantiza fondos hasta enero y reabre las agencias federales tras 43 días de parálisis
Washington. – Después de seis semanas de parálisis administrativa, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este miércoles la ley que pone fin al cierre de Gobierno más prolongado en la historia del país, que se extendió durante 43 días. El acuerdo, aprobado por el Congreso tras intensas negociaciones, permitirá reabrir las agencias federales y reanudar el pago a más de 1.3 millones de empleados públicos afectados.
“Es un honor firmar este increíble proyecto de ley y lograr que nuestro país vuelva a funcionar”, declaró Trump desde el Despacho Oval, al estampar su firma en el documento respaldado por 222 votos a favor y 209 en contra en la Cámara de Representantes.
Un acuerdo con tensiones políticas
El cierre se había originado por el bloqueo legislativo en torno a subsidios sanitarios, una disputa que mantuvo enfrentados a republicanos y demócratas durante más de un mes. Al referirse al proceso, Trump acusó a la oposición de utilizar el tema como instrumento político.
“Solo quiero decirle al pueblo estadounidense que no debe olvidar esto”, dijo el mandatario, calificando el cierre como “una extorsión demócrata” y apuntando directamente a la falta de acuerdos sobre los programas de salud.
El presidente también envió un mensaje a su bancada: “Si elimináramos la obstrucción parlamentaria, esto nunca volvería a suceder”, advirtió, recordando que el país tiene “otra fecha próxima en un futuro no muy lejano”, en alusión a las elecciones legislativas de 2026.
Lo que contempla la nueva ley de financiamiento
El proyecto de ley aprobado garantiza la financiación de la mayoría de las agencias federales hasta el 30 de enero del próximo año, asegurando su funcionamiento tras semanas de interrupción.
Entre las partidas principales se incluyen:
- *Aumento de recursos para la Patrulla Fronteriza y los servicios migratorios, con el propósito de reforzar el control en la frontera sur.
- *Fondos adicionales para el Departamento de Asuntos de Veteranos, destinados a mejorar hospitales y servicios médicos para exmilitares.
- *Financiamiento para el Departamento de Agricultura, enfocado en ampliar los programas de nutrición infantil y asistencia alimentaria.
Sin embargo, los líderes demócratas rechazaron la propuesta final, argumentando que el texto eliminó la ampliación de subsidios sanitarios y dejó sin financiamiento a programas clave como el Obamacare, cuyo presupuesto expirará en diciembre.
Fin de la parálisis y retorno a la normalidad
El cierre de Gobierno —el más largo en la historia de Estados Unidos— provocó cancelaciones masivas de vuelos domésticos y la suspensión de salarios de más de un millón de empleados federales, afectando a múltiples sectores.
Con la firma del acuerdo, se espera que desde este jueves los trabajadores federales retomen sus funciones, luego de que varias agencias iniciaran los procesos de reactivación administrativa.
Un Gobierno reabierto, pero con grietas políticas
La firma de la ley pone fin a una crisis institucional que paralizó buena parte del aparato público estadounidense y dejó en evidencia la profunda polarización política en el Congreso.
Aunque el acuerdo devuelve la normalidad al país, las tensiones entre el Ejecutivo y la oposición continúan latentes. En palabras del propio presidente, la lección aún no se olvida: “El pueblo estadounidense no debe olvidar esto”.

