EsquinaRD. – Este sábado ocurrió un hecho trágico en la Universidad de Brown, en Providence. A las 4:05 de la tarde, la ciudad recibió el reporte de un tirador activo. El saldo es devastador: dos personas muertas y ocho heridas hasta el momento.
“Recibimos un llamado a las 4:05 PM (local) con un reporte de un tirador activo. Puedo confirmar que hay dos individuos que murieron esta tarde y otros ocho en situación crítica, aunque estable, en el Hospital de Rhode Island”, dijo el alcalde Brett Smiley.
Sin detenidos, mucha tensión
“No hay nadie en custodia”, confirmó el alcalde. La policía busca a un hombre vestido de negro. No han recuperado el arma. Cada minuto cuenta y la incertidumbre pesa más que el silencio en el campus.
Hasta el momento, las autoridades pidieron a estudiantes y personal mantenerse refugiados y alejarse del edificio Barus & Holley, corazón académico de ingeniería y física. El campus activó protocolos: puertas aseguradas, celulares en silencio y esperar.
Alertas que fueron y vinieron
A las 5:27 p. m., la universidad reportó disparos cerca de la calle Governor, a dos cuadras del edificio principal. Más temprano, una alerta habló de un sospechoso detenido. Luego, la rectificación: la búsqueda seguía activa.
La policía local trabaja junto al FBI y la ATF. Se recopilan videos, testimonios y evidencias. “Este es el triste estado de nuestro país en este momento, donde tenemos que planear para estas cosas”, dijo Smiley, recordando los simulacros.
Los estudiantes fueron trasladados a espacios seguros para recibir apoyo emocional. Nadie quedó indiferente. Brown, parte de la Ivy League, alberga más de 10,000 estudiantes entre grado y posgrado. Hoy, todos cuentan los minutos.
Reacción desde la Casa Blanca
El presidente Donald Trump informó que fue notificado del tiroteo y afirmó: “He recibido un informe completo sobre la situación en la Universidad Brown, qué cosa tan terrible es, y todo lo que podemos hacer ahora es rezar por las víctimas”.
Providence mantiene una fuerte presencia policial y de bomberos cerca del campus. Las autoridades piden evitar la zona. La investigación continúa y las preguntas quedan abiertas, mientras una comunidad intenta volver a respirar.
