Zohran Mamdani acaba de hacer historia en Nueva York. Con 33 años, este joven asambleísta estatal se convirtió en el primer musulmán en ganar las primarias demócratas para la alcaldía de la ciudad, superando nada menos que al exgobernador Andrew Cuomo. Con el 95% de los votos escrutados, Mamdani lidera con un 43%, frente al 36% de Cuomo, lo que lo coloca como favorito para las elecciones generales.
Nacido en Uganda y criado en Queens, Mamdani ha construido una carrera como organizador comunitario, asesor de vivienda y activista. Sus propuestas —como transporte público gratuito, congelar los alquileres y supermercados municipales— han conectado especialmente con votantes jóvenes, inmigrantes y de bajos ingresos, y su campaña ha sido impulsada por miles de voluntarios y donaciones pequeñas.
Antes de lanzarse a la política, fue organizador comunitario y asesor de vivienda, ayudando a familias a evitar desalojos.
Su campaña, con propuestas como congelar alquileres, transporte gratuito y supermercados públicos, ha logrado atraer a miles de voluntarios y pequeñas donaciones de base.
Los críticos cuestionan su experiencia
Pero no todos están convencidos. Algunos críticos, incluyendo su rival Andrew Cuomo, han cuestionado su falta de experiencia para manejar una ciudad con más de 300 mil empleados y un presupuesto de 115 mil millones de dólares. El New York Times, por ejemplo, no respaldó a ningún candidato en las primarias y aseguró que la agenda de Mamdani es “mal adaptada” a los retos reales de la ciudad.
Aun así, Mamdani ha logrado conectar con un electorado cansado del establishment.
Su presencia cercana en los barrios, sus mensajes en varios idiomas y su firme apoyo a causas como Palestina han reforzado su imagen de candidato diferente. Si mantiene la ventaja en la votación, se convertiría en el primer alcalde musulmán de Nueva York y en un nuevo rostro para una ciudad que parece lista para cambiar.
