El Gobierno mexicano estimó este miércoles en 61.313 millones de pesos (más de 3.400 millones de dólares) el costo para las reparaciones y apoyos sociales en el sureño estado de Guerrero tras el impacto del huracán Otis, que ha dejado 46 muertos después de tocar tierra la semana pasada.
Este es el primer cálculo oficial del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, quien ofreció en su rueda de prensa matutina un plan de recuperación con 20 puntos, que incluyen 10.000 millones de pesos para restaurar infraestructura pública en Acapulco, la ciudad más impactada.
“El costo de la inversión, que estamos ya varios días trabajando para aproximarlo lo más posible a las necesidades, es de 61.313 millones de pesos y se distribuye entre los 20 puntos que señaló el presidente de la República, ese es el monto de inversión”, expuso el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O.
Además de la reconstrucción pública en Acapulco, el Gobierno destinará la mayor cantidad de recursos, 10.471 millones de pesos, en entrega de efectivo directo a viviendas afectadas, que recibirán hasta 60.000 pesos.
Por otro lado, el Gobierno eximirá el pago de impuestos al valor agregado (IVA) y sobre la renta (ISR) hasta febrero, lo que costará 9.109 millones de pesos.
También dará una prórroga de seis meses en el pago que empresas y empleados hacen al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), y a los institutos de vivienda para los trabajadores (Infonavit y Fovissste), lo que costará 9.001 millones de pesos.
Para el sector privado, la Secretaría de Hacienda apoyará a 373 hoteles con el pago de la mitad de los intereses que contraten con la banca comercial, lo que costaría 5.000 millones de pesos.
Y a los damnificados, el Gobierno entregará una canasta de productos básicos a 250.000 familias durante tres meses, para lo que destinará 3.250 millones de pesos, además de 4.000 millones de pesos en un paquete de enseres domésticos, como estufas y lavadoras.
El resto de los recursos se reparte en rubros como programas sociales y condonación del pago de luz.
El presidente López Obrador, quien ha prometido «poner de pie» a Acapulco para Navidad, aseveró que «se cuenta con los recursos sin límite, cuando se trata de beneficiar al pueblo”.
“Es importante decir, en lo general, que contamos con presupuesto, para financiar todas estas necesidades, estos programas, y que no los consideramos o no consideramos el destinar estos recursos como gasto, sino es una inversión, afortunadamente tenemos finanzas públicas sanas», sostuvo.
Este es el primer plan de apoyo y el primer cálculo oficial de daños que ofrece el Gobierno de México tras Otis, que golpeó el miércoles pasado a la costa sur de Guerrero como categoría 5 tras una intensificación récord.