El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, reveló este miércoles que decidió posponer para mañana la denuncia que su Gobierno interpondrá en la Corte Internacional de Justicia de La Haya contra Ecuador por el asalto a la embajada mexicana en Quito.
«Se analizó temprano y sí, originalmente se tenía pensado presentarla hoy, pero será mañana para ajustar algunas cosas, ya con eso no hay malos entendidos«, afirmó en su habitual conferencia de prensa.
También agradeció las muestras de apoyo que ha recibido por parte de la comunidad internacional, en particular del presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, con quien el martes dialogó telefónicamente.
«Lula es nuestro amigo y expresó su solidaridad con nuestro pueblo desde el siguiente día del asalto a la embajada», dijo antes de transmitir el video de la llamada.
Por otra parte, el presidente celebró que, en su sesión del martes, los países miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) condenaran sin excepciones el «proceder autoritario» del Gobierno de Daniel Noboa.
«Incluso el secretario Luis Almagro, que ha tenido una actitud muy consrevadora y antidemocrática, condenó el hecho, porque la verdad es injustificable. El mismo gobierno de Argentina expresó su rechazo», dijo López Obrador al destacar el respaldo obtenido por parte de dirigentes o gobiernos con los que él ha confrontado por diferencias ideológicas.
Homenaje
Durante la conferencia, el mandatario rindió homenaje a los diplomáticos que se encontraban en la embajada de México cuando ingresaron las fuerzas armadas y de seguridad de Ecuador.
«Dejaron en alto el nombre de nuestro país, de nuestra soberanía, la dignidad de los pueblos, la defensa del derecho de asilo y del derecho internacional», dijo.
Durante la conferencia se emitió una compilación de testimonios del personal diplomático, entre ellos la embajadora Raquel Serur y el jefe de la cancillería, Roberto Canseco, así como videos de la agresión.
El viernes pasado, el Gobierno de Daniel Noboa ordenó el ingreso de policías y militares a la embajada mexicana para detener por la fuerza al exvicepresidente Jorge Glas, quien se encontraba asilado al considerar que las causas en las que se lo acusa de corrupción forman parte de una persecución política.
La invasión fue condenada de manera unánime por decenas de países y organismos internacionales que alertaron por la violación de la Convención de Viena.
Sin embargo, Ecuador insiste en justificar el violento operativo con el argumento de que México tergiversó el derecho al asilo al proteger a Glas.
RT Actualidad