EsquinaRD. – Japón acaba de hacer historia. Por primera vez en más de siete décadas, una mujer asumirá el cargo de primera ministra. Se trata de Sanae Takaichi, de 64 años, una figura del ala conservadora del Partido Liberal Democrático (PLD), quien fue elegida tras una votación interna en el Parlamento japonés.
Takaichi rompe una barrera simbólica en una nación donde la política ha estado dominada durante décadas por hombres.
Aun así, su perfil no representa una ruptura ideológica: su discurso se centra en la defensa de los valores tradicionales, la seguridad nacional y la estabilidad económica, sin grandes referencias a reformas sociales o de igualdad de género.
La nueva primera ministra llega al poder en un momento clave para Japón:
•Con una economía golpeada por la inflación y el envejecimiento poblacional.
•Tensiones crecientes con China y Corea del Norte.
•Y el reto de mantener el equilibrio en su histórica alianza con Estados Unidos.
Analistas coinciden en que Takaichi encarna una transición controlada: un cambio de rostro en un sistema político que privilegia el orden y la continuidad.Aunque su liderazgo no promete una revolución, sí marca un punto de inflexión histórico: por primera vez, una mujer lidera una de las potencias más influyentes del mundo.