WASHINGTON (AP) — El Departamento de Justicia criticó el lunes el esfuerzo de los republicanos por acusar de desacato al fiscal general Merrick Garland por su negativa a entregar materiales no redactados relacionados con la investigación del fiscal especial sobre el manejo de documentos clasificados por parte del presidente Joe Biden.
En una carta obtenida por The Associated Press, el Departamento de Justicia rechazó la demanda de los republicanos de la Cámara de Representantes de que la agencia entregue el audio completo de las entrevistas de una hora del fiscal especial Robert Hur con Biden y su escritor fantasma. Los republicanos habían dado al Departamento de Justicia hasta el lunes para proporcionar el audio.
El fiscal general adjunto Carlos Uriarte, jefe de asuntos del Congreso del Departamento de Justicia, dijo en la carta a los representantes James Comer y Jim Jordan que a pesar de que el Partido Republicano afirma lo contrario, el departamento ha cumplido con cada uno de los cuatro elementos de la citación que los republicanos de la Cámara de Representantes enviado en febrero.
“La reacción de los Comités es difícil de explicar en términos de falta de información o frustración de cualquier imperativo informativo o investigativo, dada la conducta real del Departamento”, escribió Uriarte. «Por lo tanto, nos preocupa que los comités se sientan decepcionados no porque no hayan recibido información, sino porque sí la recibieron».
Y añadió: «Instamos a los comités a evitar el conflicto en lugar de buscarlo».
La reacción del departamento y la aparente falta de voluntad para proporcionar el audio podrían desencadenar una batalla legal entre la Casa Blanca y los presidentes del Partido Republicano que lideran el esfuerzo por desacato en el Capitolio, creando potencialmente un escenario en el que Biden tendría que ejercer el privilegio ejecutivo para detener el proceso. Entrega de la grabación de audio al Congreso.
La maniobra también podría retrasar la publicación de cualquier audio hasta después de las elecciones de noviembre.
Comer respondió a la carta el lunes por la noche, diciendo que la administración Biden “no puede determinar lo que el Congreso necesita y no necesita para supervisar el poder ejecutivo”. El republicano de Kentucky se comprometió a seguir luchando para obtener los registros solicitados para su investigación.
Comer agregó: “Pronto responderemos al Departamento de Justicia”.
El intercambio es sólo el último punto de tensión entre los republicanos que investigan a Biden y el Departamento de Justicia encargado de supervisar una miríada de investigaciones federales políticamente tensas, incluida una sobre el hijo del presidente, Hunter Biden.
Hur pasó un año investigando la retención indebida de documentos clasificados por parte de Biden , de su época como senador y como vicepresidente. El resultado fue un informe de 345 páginas que cuestionaba la edad y la competencia mental de Biden, pero recomendaba que no se presentaran cargos penales contra el presidente de 81 años, al no encontrar pruebas suficientes para que el caso se defendiera ante los tribunales.
El mes pasado, Hur mantuvo la evaluación hecha en su informe en un testimonio ante el Comité Judicial de la Cámara de Representantes, donde fue interrogado durante más de cuatro horas por legisladores demócratas y republicanos.
«Lo que escribí es lo que creo que muestra la evidencia y lo que espero que los jurados perciban y crean», dijo Hur a los legisladores. “No desinfecté mi explicación. Tampoco menosprecié injustamente al presidente”.
Si los legisladores republicanos cumplen con su amenaza de acusar a Garland de desacato, requeriría el apoyo de la mayoría en el comité y luego el apoyo de la Cámara en pleno antes de que se envíe una remisión al Departamento de Justicia. Es poco probable que el departamento que dirige Garland acepte una remisión para investigar al funcionario del gabinete.
La última vez que un esfuerzo de este tipo tuvo éxito fue en 2012, cuando una Cámara de Representantes controlada por los republicanos votó para convertir al entonces Fiscal General Eric Holder en el primer miembro del Gabinete en funciones acusado de desacato al Congreso por negarse a entregar documentos relacionados con la operación de tráfico de armas. conocida como Operación Rápido y Furioso . En ese momento, los republicanos citaron el hecho de que el Departamento de Justicia no entregó, sin condiciones previas, documentos relacionados con la arriesgada operación. El Departamento de Justicia no tomó ninguna medida para procesar al fiscal general.
