Falta alrededor de una hora para dar el salto al centro en el polideportivo de San Cristóbal, y el autor de esta nota te cuenta por qué este juego podría ser histórico, no solo para los Titanes, sino también para la LNB.
Quien sigue el baloncesto profesional desde sus inicios, sabrá que tuvo una primera etapa llamada “Liga Dominicana de Baloncesto” (LIDOBA), donde por primera vez se le dio un carácter profesional al baloncesto que tanta falta hacía en un país donde los torneos «Superiores» reinaban en el territorio nacional.
En esa época, brillaron equipos como los Reales de La Vega, siendo los primeros campeones, y los Metros de Santiago, quienes alcanzaron el primer bicampeonato en la historia del torneo. Sin embargo, en 2008 surgió de la nada un equipo que se robó todas las luces: los Constituyentes de San Cristóbal, quienes eliminaron a los Reales de La Vega, que buscaban igualar el histórico bicampeonato de los Metros.
¿Lo malo? Los Constituyentes nunca pudieron ser campeones frente a su gente, ya que la temporada 2009 no fue celebrada por problemas económicos. Tras su regreso, la franquicia fue trasladada a Santo Domingo, dándole vida a los nuevos “Titanes del Distrito”.
Entre 2010 y 2020, específicamente en 2012, Los Titanes se unieron a los Tigres del Licey, una alianza que les trajo una base de fanáticos más fiel y los llevó a un nuevo nivel desde el primer día, alcanzando una semifinal contra los Indios, pero cayendo en el camino.
Las dos temporadas siguientes fueron buenas, pero en ambos casos perdieron ante los Indios en 2013 y los Metros en 2014. No sería hasta después de la temporada 2020, suspendida por el covid-19, que los Titanes regresarían a una final, esta vez contra los Leones de Santo Domingo, sus grandes rivales, final que perderían en 6 juegos.
Dos años después, en 2023, regresarían a la final, pero ahora contra los Reales, disputada frente a su gente en San Cristóbal, aunque la perderían en 7 juegos, dejando otro amargo sabor a sus fanáticos que veían regresar a su equipo a casa.
Hoy, miércoles 4 de septiembre, los Titanes del Distrito, o como yo los llamo, los «Titanes del Sur», tienen ante sí no solo la oportunidad de ganar su primer campeonato bajo el nombre de “Titanes”; hoy juegan para coronarse frente a su gente, quienes no los vieron campeones en 2009 y solo los volvieron a ver en algunas visitas recientes a San Cristóbal.
Hoy, podrían ser el equipo que logre LA PRIMERA BARRIDA EN LA HISTORIA DEL BALONCESTO DOMINICANO.