Jannik Sinner regresó al circuito profesional en el Abierto de Italia tras cumplir una suspensión de tres meses por dopaje. El número uno del mundo, de 23 años, recibió una calurosa bienvenida por parte de los aficionados en Roma. Más de 10,000 personas asistieron a su sesión de entrenamiento en el Campo Centrale, que fue transmitida en vivo por la televisión italiana.
Sinner no disputa un partido oficial desde que ganó el Abierto de Australia en enero. Durante su suspensión, se mantuvo entrenando y expresó su felicidad por volver a competir. El tenista italiano también fue homenajeado junto a sus compañeros de la Copa Davis y las jugadoras de la Billie Jean King Cup por los títulos obtenidos el año pasado.
El caso de dopaje de Sinner surgió en marzo de 2024, cuando dio positivo por clostebol, un esteroide anabolizante prohibido. Una investigación determinó que la sustancia ingresó a su organismo de manera accidental a través de un spray utilizado por su fisioterapeuta. Aunque inicialmente fue exonerado, la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) apeló la decisión y se llegó a un acuerdo que resultó en una suspensión de tres meses.
Sinner debutará en el torneo frente al ganador del partido entre Mariano Navone y el joven italiano Federico Cina. Su regreso genera gran expectación en Italia, siendo la primera vez que el país cuenta con un número uno del mundo en su torneo local.