Los Chicago White Sox concretaron un cambio que llevó al lanzador zurdo Garrett Crochet a los Boston Red Sox. A cambio, obtuvieron al receptor Kyle Teel, al jardinero Braden Montgomery, al infielder Chase Meidroth y al lanzador derecho Wikelman Gonzalez.
Crochet, de 25 años, tuvo una destacada temporada en 2024 como abridor. Registró un récord de 6-12 con una efectividad de 3.58 y 209 ponches en 146 entradas. Con dos años más bajo control del club, Crochet ganará aproximadamente $2.9 millones en 2025.
El jefe de operaciones de béisbol de los Medias Rojas, Craig Breslow, elogió el talento de Crochet. “Es un abridor número uno legítimo. Su capacidad para ponchar es impresionante y creemos que lo mejor está por venir”, comentó a MLB.com.
Crochet reforzará una rotación de Boston que ya cuenta con Tanner Houck, Brayan Bello y Kutter Crawford. Además, el equipo espera sumar a Lucas Giolito, quien se perdió toda la temporada 2024 por una cirugía de codo.
Por su parte, Chris Getz, gerente general de los White Sox, destacó el interés de cinco equipos por Crochet. “Este acuerdo superó lo que habríamos conseguido en la fecha límite de cambios, según nuestras evaluaciones”, declaró al Chicago Sun-Times.
Kyle Teel, el prospecto número 4 de los Medias Rojas según MLB.com, encabeza el grupo de jugadores adquiridos por Chicago. Con 22 años, Teel fue seleccionado en la primera ronda del draft de 2023 y acumuló un OPS de .819, 13 jonrones y 78 carreras impulsadas en ligas menores.
Montgomery, seleccionado en el puesto 12 del draft de 2024, ocupaba el quinto lugar en el ranking de prospectos de Boston. A sus 21 años, conectó 27 jonrones y produjo 85 carreras en 61 juegos con Texas A&M.
Chase Meidroth, tomado en la cuarta ronda del draft de 2022, destacó en Triple-A. El infielder de 23 años bateó para .293 con siete jonrones, 20 dobles y 57 carreras impulsadas en 122 juegos.
Por último, Wikelman Gonzalez, de 22 años, tuvo marca de 4-3 con una efectividad de 4.73 y 92 ponches en 24 apariciones en Doble-A.
El intercambio marca un paso importante para ambas organizaciones, con los White Sox apostando por talento joven y los Red Sox fortaleciendo su rotación para las próximas temporadas.