Santo Domingo. La energía en el Palacio de Voleibol vuelve a encenderse esta noche. El Club Rafael Barias, con su garra habitual y el corazón en la cancha, se juega mucho más que un partido: busca el liderato del Grupo B del Torneo de Baloncesto Superior del Distrito Nacional (TBS 2025) frente a Los Prados, a partir de las 7:00 p.m.
En busca del primer lugar
El conjunto bariano llega inspirado tras su triunfo épico del domingo, una batalla que necesitó dos tiempos extras para imponerse 107-102 sobre el Mauricio Báez, campeón defensor. Fue una noche memorable para sus figuras: LJ Figueroa brilló con 29 puntos, Eusebio Suero añadió 20, y el refuerzo Jonathan Araujo debutó con fuerza, sumando 16 tantos y 12 rebotes.
Con ese impulso, el equipo dirigido por Yoel Féliz sabe que una victoria combinada con un revés del Mauricio Báez ante San Lázaro podría colocarlos en la cima del grupo, con marca de 4-2.
Rivalidad que crece
La historia reciente entre el Barias y Los Prados promete intensidad. El año pasado dividieron honores: los pradenses ganaron el primer duelo 84-82, pero los de Villa Consuelo devolvieron el golpe con una contundente paliza 92-69 en el segundo encuentro. Esta noche, ambos llegan con cuentas pendientes y hambre de revancha.
Fortaleza ofensiva
Rafael Barias ha sido, una vez más, sinónimo de ataque explosivo. Con un promedio de 91.2 puntos por juego, se mantiene entre los equipos más productivos del torneo, apenas superado por San Lázaro. Además, comparte el mejor porcentaje en tiros de tres puntos (33%) junto a San Carlos, reafirmando su capacidad de anotar desde cualquier punto del tabloncillo.
El contexto del torneo
A falta de pocas jornadas para el cierre de la ronda regular, San Lázaro lidera el Grupo B (4-1), seguido por Bameso (3-3), Rafael Barias (3-2) y El Millón (1-5). En el Grupo A, San Carlos encabeza con 4-2, mientras Mauricio Báez, Huellas del Siglo y Los Prados buscan remontar posiciones.
El torneo, dedicado al inmortal del deporte Evaristo Pérez, ha sido una fiesta del talento local, con emociones cada noche en el Palacio de Voleibol, donde la pasión capitaleña por el baloncesto se respira en cada jugada.
