Los fanáticos en el Yankees no perdonaron a Juan Soto, quien regresó al Yankee Stadium por primera vez desde que firmó con los Mets por 15 años y 765 millones de dólares. Desde que anunciaron su nombre, los abucheos retumbaron en el Bronx.
Soto sonrió, se quitó el casco y saludó al público antes de tomar su primer turno al bate. Luego recibió una base por bolas.
“Creo que sí”, dijo Soto sobre si habían sido los abucheos más fuertes que ha escuchado. “Fueron bastante ruidosos”, comentó al medio SNY.
Cuando corrió al jardín derecho en el primer inning, varios aficionados le dieron la espalda. Aún así, el dominicano tomó la situación con calma.
“Estaba preparado”, aseguró. “Son fanáticos muy apasionados. Están dolidos y van a hacer lo que sea por su equipo. Así es como se sienten”.
Soto terminó el juego con tres boletos, una carrera anotada y un out por elevado en dos turnos oficiales. En su último turno, falló con corredores en posición de anotar, sellando la victoria 6-2 para los Yankees.
El ambiente fue tenso, pero también eléctrico. Nueva York vivió un capítulo más en la rivalidad entre Mets y Yankees, con Soto en el centro de la escena.
