El pasado domingo, los Gigantes del Cibao retiraron el número 18 de Nelson Cruz en una memorable ceremonia en el Estadio Julián Javier. Cruz ingresó al terreno montando a caballo junto a sus excompañeros Moisés Sierra y Joel Peralta, en un gesto que desbordó emotividad entre los fanáticos presentes.
“Nunca imaginé que mi número sería retirado por el equipo de mi querido pueblo. Agradezco a la fanaticada, los directivos, mis compañeros, la liga y sus equipos, porque todos me inspiraron”, expresó Cruz durante el acto.
El dorsal 18 ahora se une a los números retirados de figuras como Erick Almonte (13), Efraín Valdez (34), Fausto Cruz (7) y Pedro Feliz (7). Cruz, oriundo de Las Matas de Santa Cruz, destacó el impacto que los Gigantes tuvieron en su carrera. “Cuando me puse el uniforme por primera vez, sentí que verdaderamente era un profesional y que pertenecía al equipo con el que siempre quise jugar”, afirmó.
En sus nueve temporadas con los Gigantes, desde sus inicios como Pollos Nacionales en 2001 hasta 2023, Cruz dejó una marca imborrable. Conectó 198 imparables, 34 dobles, 33 jonrones (tercero en la franquicia). Remolcó 118 carreras (quinto), registrando un promedio de bateo de .297 y un OBP de .370.
En los playoffs, su impacto fue igual de contundente, con un promedio de .298, 14 jonrones y 54 carreras impulsadas en 79 partidos. Estas estadísticas lo consolidan como uno de los jugadores más importantes en la historia de los Gigantes.
El gerente de mercadeo de los Gigantes, Rafael Almánzar, resaltó su legado. “Nelson no solo es un referente del béisbol dominicano, sino también un pilar en nuestra organización por su liderazgo y profesionalismo”, afirmó.
Moisés Sierra, capitán del equipo, también dedicó unas palabras. “Gracias por tu entrega y tus consejos. En nombre de los jugadores, te deseamos lo mejor en esta nueva etapa”, dijo emocionado.
La ceremonia incluyó un video con momentos destacados de Cruz con los del Cibao, seguido por un breve homenaje de compañeros de la liga. Johan Rojas, el último en usar el número 18, entregó a Cruz una camiseta conmemorativa, sellando un momento inolvidable para el exjugador.
Nelson estuvo acompañado por su familia, directivos del equipo y una afición que lo ovacionó de pie, confirmando que su legado en San Francisco de Macorís quedará para siempre.