Se sufrió, pero al final Colombia pudo celebrar su clasificación a los octavos de final de una Mundial Femenino por segunda vez en su historia.
En un partido muy disputado, en el que ambos equipos lucharon en cada rincón del campo por cada balón, fue Marruecos la que se llevó la victoria 1-0 gracias a un gol en tiempo de descuento de la primera parte.
Llegó después de un penalti que paró brillantemente la portera colombiana Catalina Pérez, quien no pudo hacer nada ante la rápida reacción de Ouzraoui para aprovechar el balón dividido y combinar con Lahmari para conseguir el gol que a la postre sería el definitivo.
Una victoria histórica para Marruecos que también avanzó a la segunda ronda a expensas de Alemania, una de las favoritas que fue eliminada al no poder pasar del empate frente a Corea el Sur.
La derrota no impidió que Colombia clasificara como primera de grupo gracias a las dos victorias que consiguió en sus dos primeros partidos.
Su próximo rival en octavos será Jamaica.
En total de seis representantes latinoamericanos cinco ya están eliminados, un balance negativo que deja al descubierto la realidad del fútbol femenino en la región, todavía muy lejos del desarrollo que se vive en otras partes del mundo.