Tesla sufrió una caída del 14% en la bolsa, arrastrando consigo unos 150.000 millones de dólares del mercado. La pelea pública entre el CEO de la automotriz, Elon Musk, y el presidente de EE.UU., Donald Trump, desató la tormenta. El Dow Jones retrocedió un 0,25% y dejó un clima de incertidumbre para las tecnológicas.
¿Qué pasó? Una pelea con consecuencias económicas
Todo comenzó cuando Musk criticó el proyecto de ley fiscal de Trump, calificándolo como “una abominación repugnante”. La Casa Blanca respondió con fuerza: Trump amenazó con retirar los subsidios y contratos gubernamentales a empresas como Tesla y SpaceX.
En medio de la tensión, Musk lanzó acusaciones aún más serias, incluyendo la amenaza de desmantelar la nave Dragon de SpaceX y la afirmación de que los aranceles de Trump causarían una recesión a final de año.
Trump no se quedó callado: la amenaza directa
El presidente de EE.UU. respondió desde su red Truth Social, asegurando que “cancelar los subsidios a Elon sería la forma más fácil de ahorrar miles de millones en el presupuesto”. La confrontación dejó a Tesla tambaleando en el mercado y afectó a otras tecnológicas.
La bomba de Musk: la Lista de Epstein
Para rematar, Musk soltó una de las acusaciones más explosivas: afirmó que la famosa Lista de Epstein no se ha revelado porque Donald Trump figura en ella.
Esto provocó aún más revuelo, tanto en la política estadounidense como en la confianza de los inversores, que vieron cómo Tesla se desplomaba en tiempo récord.
(Hipertextual)